Cuando los poderes detrás de lo tecnológico se tornan cada vez más sombríos y la red que ha tejido internet parece atraparnos más que conectarnos, es urgente explorar el panorama reciente de las artes, desde los videojuegos a la arquitectura, pasando por el cine o la música, para recuperar los magníficos tesoros generados por la cultura digital. Al igual que la antigüedad tuvo sus grandes expresiones, mitos y monumentos, también la época actual los tiene, aunque todavía no se hayan reconocido lo suficiente.