Los orígenes del manga se remontan a los libros de literatura popular del periodo Edo, obras ilustradas de contenido humorístico en las que aparecían seres humanos, criaturas fantásticas e incluso celebridades del momento. Este tipo de novela ilustrada fue ganando popularidad y el término manga comenzó a emplearse para describir historias basadas en palabras e imágenes de tono humorístico y satírico.