La carne se pudre, los huesos se desmoronan y el alma se disipa a los cuatro vientos. Como si fuera neblina... Ah... Mi cuerpo se está deshaciendo.” Lo cierto es que parece mentira... El corazón no le late y no hay señal de ondas cerebrales. Muestra el aspecto típico de un cuerpo que se ha descompuesto durante largo tiempo bajo el agua. Desde un punto de vista médico y científico no cabe la menor duda: es un cadáver. Lo sorprendente es que puede moverse y hablar, incluso puede pensar. Cuesta un poco entenderle porque su lengua está medio podrida, pero por lo demás es un hombre coherente...u lengua está medio podrida, pero por lo demás es un hombre coherente...