Con La casa en el confín de la Tierra (1908), William Hope Hodgson logró combinar ciencia ficción, fantasía y terror para dar forma una novela que alcanzó la categoría de clásico. Casi un siglo más tarde, Richard Corben -toda una leyenda del cómic, galardonado con el Gran Premio del Festival de Angoulême- formó equipo creativo con su eterno colaborador Simon Revelstroke para poner su pasión, experiencia y talento al servicio de esta impactante adaptación al cómic.