Entre nuevos giros argumentales, toda una serie de memorables personajes hace su aparición—con mención especial a los dos encantadores retoños de Werewolf Jones—, mientras la pareja protagonista se embarca en un viaje romántico y desesperado a la capital europea del vicio legalizado, Amsterdam. Una vez allí, nuestros héroes descubren que han olvidado en casa todos sus antidepresivos. Solo Búho podrá salvar entonces su relación gracias a una maleta llena de ¿dildos de vidrio?